Dentro de toda la abundancia de revelación que Dios nos ha enviado; hace algún tiempo,
pudimos estudiar un tema el cual llamamos: DE ESTATUA A ESTATUA, o sea, de la estatua que relata el profeta Daniel en el Antiguo Testamento, hasta la estatua del anticristo. Dentro del desarrollo de esa oportunidad vimos lo que relata el libro de Daniel respecto a los 3 jóvenes hebreos que fueron lanzados al horno de fuego; figura de la gran tribulación; los habían lanzado a consecuencia de no haber idolatrado la estatua de Nabucodonosor; lo asombroso es que en este tiempo se está moviendo mucho lo relacionado a ídolos, por todo el mundo se ven ídolos en los diferentes ambientes que puedan existir o que se presten para ese efecto. Lo lamentable es que dentro de la Iglesia de Cristo se está introduciendo también ese movimiento, porque los ministros de alabanza se están dejando idolatrar por el pueblo de Dios y se están aprovechando de la idolatría del pueblo para hacer comercio con el don que Dios les entregó; incluso los ministros primarios también están cayendo en el mismo plano idolátrico. Pero el punto es que en la idolatría de la estatua de Nabucodonosor, en el Antiguo Testamento, se deja ver que hubo instrumentos musicales para que formaran parte de la adoración que exigía al pueblo; o sea, la idolatría involucra la música, y la estatua que se habla en el libro de Apocalipsis también está íntimamente con música; y de la misma forma como lo hicieron con los 3 jóvenes hebreos, en el tiempo de la gran tribulación quien no adore a la bestia, lo matarán.
pudimos estudiar un tema el cual llamamos: DE ESTATUA A ESTATUA, o sea, de la estatua que relata el profeta Daniel en el Antiguo Testamento, hasta la estatua del anticristo. Dentro del desarrollo de esa oportunidad vimos lo que relata el libro de Daniel respecto a los 3 jóvenes hebreos que fueron lanzados al horno de fuego; figura de la gran tribulación; los habían lanzado a consecuencia de no haber idolatrado la estatua de Nabucodonosor; lo asombroso es que en este tiempo se está moviendo mucho lo relacionado a ídolos, por todo el mundo se ven ídolos en los diferentes ambientes que puedan existir o que se presten para ese efecto. Lo lamentable es que dentro de la Iglesia de Cristo se está introduciendo también ese movimiento, porque los ministros de alabanza se están dejando idolatrar por el pueblo de Dios y se están aprovechando de la idolatría del pueblo para hacer comercio con el don que Dios les entregó; incluso los ministros primarios también están cayendo en el mismo plano idolátrico. Pero el punto es que en la idolatría de la estatua de Nabucodonosor, en el Antiguo Testamento, se deja ver que hubo instrumentos musicales para que formaran parte de la adoración que exigía al pueblo; o sea, la idolatría involucra la música, y la estatua que se habla en el libro de Apocalipsis también está íntimamente con música; y de la misma forma como lo hicieron con los 3 jóvenes hebreos, en el tiempo de la gran tribulación quien no adore a la bestia, lo matarán.
Lo que debemos considerar entonces es la importancia que toma la alabanza en el tiempo final y la contaminación a la que está siendo sometida; porque el diablo está cada vez más interesado en que no podamos ser purificados, sino que estemos contaminados en todo lo que nos rodea y en este caso, vemos que la alabanza no está exenta de esa contaminación, porque en este tiempo la alabanza será muy utilizada por Dios para que nosotros veamos muchas cosas que no habían sido reveladas.
Oh Dios, como es tu nombre, así es tu alabanza hasta los confines de la tierra; llena de justicia está tu diestra. (Salmos 48:10 LBLA)
El versículo anterior tiene una revelación maravillosa; específicamente cuando dice que Su nombre es como Su alabanza; lo cual debemos tomar como parámetro para ver en este tiempo qué alabanza es la que estamos entonando cuando nos reunimos para alabar a Dios, porque si nos imaginamos cómo es el nombre de Dios, y no coincide con lo que estamos alabando, entonces esa alabanza es de la estatua de la bestia; de aquí podemos deducir que los ritmos seculares no se pueden mezclar con la alabanza de Dios, porque SU NOMBRE = ALABANZA.
Porque en mí ha puesto su amor, yo entonces lo libraré; lo exaltaré, porque ha conocido mi nombre. (Salmos 91:14 LBLA)
El anterior versículo podemos parafrasearlo sustituyendo NOMBRE por ALABANZA; pero no solamente podemos sustituir esa palabra, sino que, la palabra EXALTARE, en el idioma hebreo, se puede traducir: levantar y arrebatar, con lo que podríamos completar nuestra paráfrasis:
Porque en mí ha puesto su amor, yo entonces lo libraré; lo ARREBATARE, porque ha conocido mi ALABANZA. (Salmos 91:14)
Si no conocemos Su alabanza, no conocemos Su nombre, por consiguiente podríamos estar cantando a la estatua de la bestia; en lo cual no puede haber esperanza para el arrebatamiento.
Cuando hacemos el estudio de otros detalles bíblicos, nos encontramos que interesantemente la Biblia tiene 1189 capítulos, siendo la mitad de ellos, el capítulo 118:8 del libro de los Salmos. En el siguiente capítulo inicia el Salmo 119, el cual es el más grande y que podemos decir que está tipificando como el pacto más grande y es al cual nosotros pertenecemos. Después sigue el Salmo 120 iniciando con los cánticos graduales de ascenso, en los cuales podemos identificarnos porque señala a los que seremos arrebatados; porque la alabanza y adoración Dios la pone en los corazones de los que seremos parte de la novia con la cual El se casará.
Lo lamentable, como ya lo mencionamos, es que muchos salmistas de este tiempo, hacen actividades llamadas conciertos de alabanza, pero con propósitos 100% lucrativos solamente, lo cual se desvirtúa por completo de la alabanza, el cual es exaltar el nombre del único y verdadero Dios.
Y el Ángel de YHVH respondió a Manoa: ¿Por qué preguntas mi Nombre si ves que es oculto? (Jueces 13:18 BTX2)
La palabra: oculto, se puede traducir de muchas formas, pero en la versión de la Biblia Textual la tradujeron como oculto o misterioso; lo cual nos deja ver con la paráfrasis que hicimos, diciendo que la alabanza es un misterio. De tal manera, aunque muchos músicos dicen que pueden hacer alabanzas fácilmente al ponerles música a los salmos, la verdadera alabanza de Dios seguirá siendo un misterio; de tal manera que de ponerle música fácilmente a un salmo; a decir que la alabanza es un misterio, existe una diferencia abismal que no tiene ningún punto de comparación.
Existe una secta llamada: SOLO JESUS, así como existen algunos que dicen que solo existe el Padre, convirtieron su movimiento en los TESTIGOS DE JEHOVA y otros que dicen que solo existe el ESPIRITU SANTO, lo que ha servido para que se conviertan en espiritistas; cada uno de ellos lo que busca es resaltar su teoría y eliminar las otras personas de la trinidad, pero la Biblia nos enseña contextualmente que Dios es trino: Padre, Hijo y Espíritu Santo lo cual es contrario a lo que dicen algunas sectas.
Pero entonces la secta SOLO JESUS, dice que debemos ser bautizados en el nombre de JESUS, porque muchos fuimos bautizados en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, ante lo cual los fue un acto equivocado, pero los que están equivocados son ellos porque debemos comprender que cuando somos bautizados en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, estamos siendo bautizados en el nombre de Jesús porque los 3 nombres son uno mismo, nuestro Señor Jesucristo lo dejó establecido y ahora basándonos en lo que estamos estudiando, debemos saber que el nombre de Dios, al conocerlo, es alabanza.
Tu nombre, SEÑOR, es eterno; tu memoria, SEÑOR, por todas las generaciones. (Salmos 135:13 LBLA)
Si podemos parafrasear el verso anterior, podemos decir que SU ALABANZA NUNCA PASA DE MODA, porque la palabra eterno, nos deja ver que es desde siempre y para siempre, desde la eternidad hasta la eternidad, pasando por el tiempo; por eso es que algunos cantos que Dios entregó a ministros de alabanza que quizá ya no están entre nosotros porque Dios se los llevó; siguen conmoviendo nuestro corazón porque Su alabanza es eterna.
Tus ungüentos tienen olor agradable, tu nombre es como ungüento purificado; por eso te aman las doncellas. (Cantares 1:3 LBLA)
Cuando estudiamos en algunas Biblias a lo que se refiere el anterior versículo, la palabra PURIFICADO, se refiere a ser vaciado de una vasija a otra, porque lo que se hacía en el tiempo antiguo para purificar algunas bebidas como el vino, debían ser trasladadas de vasija en vasija para ser purificadas de las heces que dejaban en una vasija. Lo interesante de esto es que las vasijas son figura de las pruebas que a veces llegan a nuestra vida; porque quizá salimos de una prueba y entramos inmediatamente a otra; ante lo cual no debemos atribuirle despropósitos a Dios porque lo que está sucediendo en nuestra vida es que nos están purificando, como le sucedió a José: primero sus hermanos lo pusieron en una cisterna, antes que lo vendieran; todo era parte de un plan maravilloso porque él necesitaba ser purificado, tenía carácter de niño mimado y para purificarlo, empezaron por quitarle su vestidura de colores con la que su papá le gustaba tenerlo; pero lo metieron en la cisterna y su carácter empezó a cambiar. El siguiente cambio de vasija fue cuando lo venden a los madianitas para ponerlo en la tarima de esclavo y poderlo vender, y es precisamente cuando lo compraron para estar en la casa de Potifar. Estando en la casa de Potifar llega a estar en cierta posición y de pronto lo vuelven a cambiar de vasija porque llega a estar en la cárcel antes de estar en eminencia. Cuando terminó su purificación, su alabanza era pura porque lo habían llevado de vasija en vasija y en cada una dejó lo que no le agradaba a Dios.
Existen experiencias por las que quizá estamos atravesando, las cuales creemos que cada vez son peores y que no encontramos el final de la prueba, pero lo único que está sucediendo es que están purificándonos; porque Su nombre es Alabanza y en el verso anterior podemos ver que Su alabanza es como ungüento purificador.
El nombre del SEÑOR es torre fuerte, a ella corre el justo y está a salvo. (Proverbios 18:10 LBLA)
En las pruebas es donde más debemos alabar a Dios. Cuando esté el momento de la alabanza en el culto a Dios, lo que debemos hacer es alabar el nombre de Dios sin importar lo que nos rodea porque la alabanza del Señor es torre fuerte, ante Su alabanza podemos correr y ser salvos.